«Me he inspirado en dos tendencias que serán un éxito el próximo año: el steampunk & el glam. De la fusión de ambas, mi colección crea un nuevo concepto: el Steam Glam, una propuesta única, made in Groenlandia, que causará sensación», aseguraba Jesús Lorenzo para Vogue en el backstage.
La estética gótica y retrofuturista, reinterpretada por Jesús Lorenzo, fue el broche de oro a una semana de celebración del talento y la creatividad de la moda española.
Para la mañana, el peletero propone visones de colores vivos –azul Klein, rojo, amarillo–, pieles con manchas y astracán. Se aprecia un punto arty en las piezas en las que se fusiona el weasel (comadreja) con las napas metalizadas, el visón con textil estampado y las martas cibelinas con lana. Incluso aparecen prendas que, a modo de lienzo, han sido pintadas a mano para la ocasión. A la hora del cóctel, las creaciones en castor, racoon y lince se presentan en combinación con napas grabadas de efecto animal. La noche llega con el hit de Hercules and Love Affair ‘Blind’; los diseños se sofistican todavía más y aparecen los visones con efecto oro, el astracán bitono negro-azul y las delicadas martas cibelinas.
Reina la silueta A, los volúmenes arquitectónicos y los cortes asimétricos. La inversión de la casa en I+D se traduce en piezas modernas, reversibles y ligeras, en las antípodas del abrigo de antaño.
Con estas creaciones transgresoras y sorprendentes, la casa se afianza en su compromiso por renovar el estilo de la moda en piel.