El diseñador pamplonés rindió tributo a sus padres tras un desfile muy aplaudido en la pasarela madrileña.
El desfile que ayer por la noche protagonizaron las propuestas del pamplonés Jesús Lorenzo en la Mercedes Benz Fashion Week en Madrid tuvo mucho de moda, y aun más de emoción. El diseñador aprovechó su presencia en el mayor escaparate de la moda en España para celebrar el 40 aniversario de la marca de creaciones de moda en piel Groenlandia, y para homenajear a sus padres, José Jesús Lorenzo y María Pilar Morales, que fueron los que comenzaron con la marca. “El éxito también les corresponde a ellos. Ahora les toca disfrutar de él”, decía Jesús Lorenzo poco después del desfile, durante el que entregó a sus progenitores una placa conmemorativa del aniversario.
Las propuestas del pamplonés, además, gustaron. “Por lo que oído las críticas han sido positivas”, decía el diseñador, que destacaba que la jornada de ayer, con el premio a Alvarno y los aplausos recogidos por él mismo, había sido una “gran jornada” para la moda navarra.
Lorenzo quiso que sus propuestas fueran “atrevidas”, que destacaran por “su colorido y por una presentación diferente a la habitual”. Su colección, titulada Natural Look, también era un homenaje a los 40 años de Groenlandia. Por eso se inspiraba en la estética de aquellos años 70, época de grandes revoluciones en la política, la moda y la música. En una nota de prensa, el diseñador explicaba que “si, hasta entonces, el ideal de belleza era generalmente aceptado por todo el mundo, el concepto que mejor define el estilo años 70 es diversidad, aglutinando aquellos años de búsqueda de libertad, independencia e individualidad. Desde el idealismo hippy al movimiento punk, pasando por lo artificial de la cultura disco, con sus materiales brillantes, lentejuelas y excesos estilísticos, reservados a la vida nocturna”.
En ese ámbito, surgió el Natural Look que da título a la colección de Lorenzo y que le ha inspirado. Es el estilo que adoptaron en primer lugar las mujeres profesionales y ejecutivas, dando prioridad a su trabajo por encima de su aspecto. “Así, mostraban una imagen sencilla, cuidada y natural, con poco maquillaje y de colores suaves, melenas pulcras y arregladas y dando importancia a una figura esbelta y sensual”.