El diseñador navarro Jesús Lorenzo ha presentado por sexto año su colección en la pasarela Fashion Week Madrid demostrando por qué tres generaciones después la firma familiar Groenlandia sigue siendo un éxito.
Sus diseños rompedores acercan al cliente más joven, -mujer y también hombre-, al mundo de la peletería menos convencional y clásica. Sus pieles teñidas, y las prendas pintadas a mano por el padre de Jesús Lorenzo, son de lo más espectacular y las primeras de la colección en venderse.
El origen de sus pieles es el cordero español para el cuero, el visón americano y el astracán de Afganistán. Pieles de pastoreo para prendas de lujo con cortes modernos. Para el diseñador, “no hay pieles mejores o peores, es cuestión de saber utilizarlas”. “Facetas y contrastes”, nombre de la colección que se mueve entre la estética del cine negro de los años 40 y el espíritu ochentero de películas como Grease (1978). La mujer viste líneas limpias, faldas con vuelo y cuellos caja. Para ellos el abrigo oversize, en pieles con poco volumen, debajo del cual esconden un perfecto esmoquin.
De los “shoking colours” (rojos, azul klein, amarillos y tintados multicolores) a los tonos más suaves, como tonos empolvados rosas, verdes o nácar. El azul klein es una de las estrellas de la colección. Astracán teñido de azul, y visón azul en el que “se tiñe la lana, pero se deja la pua natural para no matar el brillo de la piel”, apunta Jesús Lorenzo.
El padre de Jesús Lorenzo ha pintado a mano dos de las piezas del desfile, un jersey masculino y un abrigo tipo capa.
El vestido de nova (imagen inferior) es de cordero español, en blanco roto y pintado a mano creando vetas de color tierra que le dan un aspecto mármol. Tiene vuelo ochentero con una larga cola y corto por del ante. ¿No os parece espectacular?